La transformación digital nació como un concepto abstracto sobre el cambio de la sociedad, en todos sus aspectos, mediante la aplicación de tecnologías digitales. Este concepto ha sido aceptado por el entorno empresarial como vehículo de cambio de los procesos productivos, de cara al aprovechamiento pleno de los beneficios de las TICs. En este sentido, la sola aplicación de tecnología no implica un proceso de transformación digital, ya que la cultura empresarial y la implicación de la dirección (y la plantilla en su totalidad) son dos elementos claves que deben de ir de la mano para que un proceso de este calibre lleve a buen puerto. Teniendo en cuenta esto ¿Cómo se relacionan la digitalización con la Industria 4.0 y con este viaje hacia la cuarta revolución industrial?
En la actualidad la tecnología evoluciona a una velocidad prácticamente imprevisible, y en 2011 nació un nuevo concepto en Hannover, llamado por su creador Industria 4.0. Desde entonces, numerosos autores han querido dar forma a este concepto llegando a insinuar que la Industria 4.0 no es sino el principio de una nueva revolución industrial cuyo elemento conductor es el impacto que Internet ha creado en los medios de producción.
Las fábricas inteligentes definirán la cuarta revolución industrial
Por lo tanto, la defensa más o menos consensuada de los autores especializados dice que esta Revolución 4.0 se está fraguando sobre la digitalización ya establecida en los principales ámbitos de la sociedad. En este sentido, estaríamos hablando de un nuevo paradigma empresarial cuyos propulsores pretenden que esté sustentada en la automatización cada vez más intensiva de las fábricas. El fin último es que, al igual que ya llevamos años hablando de las ciudades inteligentes, posibilitadas por las cada día más aplicaciones del IoT, comencemos a hablar de las fábricas inteligentes. En definitiva, la Industria 4.0 pretende optimizar la producción mediante 6 aspectos:
- Personalización masiva.
- Adaptación de la cadena de producción.
- Seguimiento y la autoconciencia.
- Avanzados paradigmas de interacción hombre-máquina.
- Optimización de la producción posibilitada por la ya mencionada IoT.
- Nuevos modelos de negocio.
Como podemos observar, la cuarta revolución industrial no vendrá definida por la simple aplicación de los nuevos avances tecnológicos, sino por la creación de un nuevo sistema de producción sustentado en la digitalización existente y que sepa implementar estos nuevos avances de forma cohesionada.
¿Qué avances tecnológicos posibilitarán esta nueva revolución industrial?
Aunque no definan este nuevo paradigma, nadie puede poner en duda que los últimos avances tecnológicos están siendo los grandes protagonistas de la Industria 4.0 por su papel a la hora del viaje hacia este nuevo paradigma. ¿Cuáles son estos avances?
- IoT (Internet of Things) – En castellano Internet de las cosas, su premisa se basa en la interconexión de cualquier objeto con cualquier otro de su alrededor. El objetivo es que mediante la comunicación entre ellos, dichos objetos sean más independientes e «inteligentes». Se espera que el impacto tecnológico y social del IoT será muy alto, sin embargo no se prevé la generalización de dispositivos con esta tecnología hasta al menos 2020.
- Fabricación aditiva – Comúnmente conocido como impresión 3d, es una tecnología más barata, rápida y sostenible de creación de piezas. La impresión 3d por sus características es indispensable para la personalización masiva de la producción sin que se disparen los costes.
- Big Data – Es el conjunto de datos estructurados y no estructurados que por su tamaño no pueden ser recogidos por técnicas tradiciones. Su volumen, variabilidad y velocidad los hacen muy atractivos para las empresas de cara a su análisis. Su aplicación ha sido tradicionalmente para procesos comerciales aunque también empiezan a utilizarse en la optimización de los procesos productivos.
- Inteligencia Artificial – Estaríamos hablando de la simulación de procesos de inteligencia humana realizada por sistemas informáticos. Podríamos destacar el aprendizaje, característica cada vez más extendida en productos de consumo e industriales.
- Robot colaborativos – Es un avance más de la robótica industrial. Estaríamos hablando de robots de fácil programación y capaces de colaborar en el mismo entorno con humanos sin intrincadas restricciones de seguridad.
- Realidad Aumentada y virtual – Respecto a la realidad aumentada nos encontraríamos con un escenario real donde se incorporarían elementos virtuales que enriquecerían la información que captamos con nuestros sentidos. En principio es más accesible y lleva años utilizándose en mercados de consumo. Por el contrarío en la realidad virtual nos encontraríamos con un escenario virtual 3D más difícil de generar. En la actualidad se está extendiendo en el mercado industrial, por ejemplo, para la formación de trabajadores.
- Cloud – La nube es el entorno donde actualmente podemos disponer nuestra información o aplicaciones, sin la «necesidad de un dispositivo físico». A esta información accederíamos gracias a una conexión a Internet y su mayor ventaja es el bajo coste y la accesibilidad de la información.
- Ciberseguridad – Los cada vez más habituales ataques de ransomware, así como el aumento desproporcionado de dispositivos conectados propiciado por el IoT, ha convertido a la ciberseguridad en un elemento primordial en el entorno industrial.
Como podéis observar, la cuarta revolución industrial así como la Industria 4.0 son conceptos que en la actualidad están muy alejados de las pequeñas y medianas empresas. Esto no significa que existan propuestas adaptadas para pymes, que pretenden que este tipo de negocio puedan disponer de los beneficios de estos avances tecnológicos.